sábado, 19 de junio de 2021

José María de Cossío. Autor del más célebre tratado técnico e histórico del mundo taurino. Académico de la Lengua

 

José María de Cossío y Martínez-Fortún, señor de la casona de Tudanca, vallisoletano de nacimiento, montañés de estirpe, de ejercicio y de adopción, hidalgo rural, escritor, académico, alcalde de Tudanca, presidente del Ateneo de Madrid, hombre de mundo, lleno de honores y de grandes cruces,

Escritor y polígrafo español miembro de la Real Academia Española y autor de un monumental tratado taurino “Los Toros”, publicado en cuatro tomos entre 1943 y 1961

José María nació en Valladolid, el 25 de marzo de 1892. Fue el menor de los cuatro hijos de Mariano de Cossío y Cuesta Polanco y de Carmen Martínez-Fortún y Martínez Talavera, familia montañesa hidalga con casasas solares en Cosío y en La Lastra, en Cantabria.

Su abuelo paterno  fue Francisco Cossío y Salinas, su hermano mayor Francisco (Sepúlveda, 1887-1975) sería director del Museo Nacional de Escultura y también de El Norte de Castilla (entre 1931 y 1943), y su otro hermano, Mariano (1890-1960), sería un gran pintor del Realismo. Su abuela paterna Dolores de la Cuesta y Polanco. En Valladolid habitaronn en la Casa (de los marqueses) Revilla, un palacio del XVI que durante más de un siglo poseyó la familia Cossío.

Hasta los años de la Guerra Civil era tradición de esta familia montañesa el cultivo de sus tierras de labranza y sus extensas praderías y la crianza de sus cabañas de raza tudanca.

Cursó en Valladolid la licenciatura de Derecho, donde se licenció en 1912, y se trasladó a Madrid a estudiar el doctorado. Más adelante estudió Filosofía y Letras en la Universidad de Salamanca, donde fue alumno de Miguel de Unamuno. Ya desde sus años de juventud, José María de Cossío tuvo una clarísima vocación literaria que se proyectó hacia la poesía, al mismo tiempo que empezó a ocuparse de la biblioteca de la Casona en Tudanca –la Tablanca de Peñas arriba, de Pereda–y a publicar sus primeros trabajos. En 1920 editó su primera obra, un poemario titulado Epístolas para amigos. Se convirtió en figura habitual de las tertulias madrileñas y colaboró en publicaciones como El Sol, Revista de Occidente y ABC. El 6 de junio de 1948 ingresó en la Real Academia Española con el discurso «Lope de Vega, personaje de sus comedias» y ocupó el sillón G.
 
Experto y gran aficionado al mundo taurino, fue amigo de toreros como José Gómez, Joselito; Ignacio Sánchez Mejías; Rafael Ortega "El Gallo"; Pepe Luis Vázquez; Antonio Bienvenida, y Domingo Ortega. En 1934 inició la redacción de su monumental obra dedicada a la tauromaquia, Los toros, en cuatro volúmenes, publicados entre 1943 y 1961 y reeditados más tarde, en 1989, en once por Espasa-Calpe. Uno de sus colaboradores en su magna obra sobre la tauromaquia fue el poeta Miguel Hernández. Fue amigo también de poetas de la generación del 27 como Gerardo Diego, con quien mantuvo una extensa correspondencia.

Tuvo una especial vinculación con Cantabria, de donde su familia era oriunda. Escribió varios libros sobre autores montañeses, sobre todo José María de Pereda, de quien editó las Obras completas. Aficionado también al fútbol, ejerció la presidencia del Racing de Santander entre 1932 y 1936. En su trayectoria no debe dejar de consignarse su entusiasta colaboración con su gran amigo Pedro Salinas, en la creación de unos cursos que más tarde constituirán la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP).

De todos es conocida la prodigalidad de José María de Cossío para con sus amigos durante largos años. Los últimos años vivió en la casona familiar de Tudanca, donde compartió comidas y largas sobremesas con el matrimonio formado por la poetisa cántabra Matilde Camus y Justo Guisández.

La Casona de Tudanca es un edificio construido en 1752 por encargo de su propietario, el hidalgo don Pascual Fernández de Linares y Gómez de la Cotera, un indiano que tras hacer su fortuna en Perú retorna a su pueblo y trata, mediante su edificación, mostrar su riqueza.

Cuando don Pascual fallece y al no dejar descendencia la casona pasa a poder de la familia García de la Cuesta y Velarde, desde entonces a esta casa también se le conoce como Palacio de la Cuesta. Más adelante la casa perteneció a don José María de Cossío.

 En la fachada principal de la Casona de Tudanca

Escudo de armas de Pascual Fernández de Linares Gómez y Herrero, certificadas por el rey de armas Juan Alonso Guerra, siéndole expedida la Ejecutoria de Hidalguía para Indias en 1731 –las armas portan la inscripción ‘Guardo tan bien el castillo con este venablo armado que no fue ninguno osado a atreverse a combatillo’–

Escribió abundantemente sobre autores españoles del Siglo de Oro, como Alonso de Ercilla, Luis de Góngora y Baltasar Gracián, entre muchos otros. Es autor de una obra de referencia sobre la mitología en la poesía española, Fábulas mitológicas en España (1952). En 1962 fue nombrado presidente del Ateneo de Madrid. 

Escudo de Cossío en Santillana de Mar (Cantabria)

En mayo de 1975 cede la Casona de Tudanca con todo su contenido a la Diputación Provincial de Santander. Falleció en su ciudad natal el 24 de octubre de 1977.

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