José M. Figueroa Alcorta. Abogado y estadista -presidente 1906/10- argentino

 

Político argentino que fue presidente de la República entre 1906 y 1910, tras la muerte de Manuel Quintana. Única persona en ejercer la titularidad de los tres poderes del Estado en la Argentina (Ejecutivo, Legislativo y Judicial) y, por otra parte, fue quien inició, en 1907, la tradición de que los presidentes apadrinaran al séptimo hijo varón de las familias argentinas.

José María (Cornelio del Corazón de Jesús) Figueroa nació en Córdoba (Argentina) el 20 de noviembre de 1860, siendo hijo de José Cornelio de Figueroa Valverde (1822-1893) y de Teodosia Alcorta Isnardi. Uno de sus antepasados fue el Maestre de Campo Juan Jacinto de Figueroa Mendoza Cabrera Celis de Burgos*, de linaje hidalgo, nacido en 1725 y fallecido el 31 de marzo de 1786 en Córdoba (Argentina), donde se habían asentado sus ancestros.

*Maestre de Campo, Alcalde de 2º Voto en 1763 y Alcalde de la Santa Hermandad en 1759. Encomendero de Quillotara. Propietario condómino de la Estancia Simbolar, heredó parte de la estancia La Limpia Concepción y la estancia de Urahuerta de su madre. En 1762 compró con su cuñado don Pedro de Argañarás y Murguía la Estancia Sinsacate. En 1758 tomó posesión de la Estancia Las Peñas que heredó de su tío abuelo don Alonso Suárez de Velasco.

 

Estudió en el Colegio de Monserrat, y derecho en la Universidad de Córdoba, en la que se graduó en leyes en 1882, y el mismo año fue designado para dictar en la antigua casa de estudios una cátedra de derecho internacional.

José Figueroa alternó la docencia universitaria y su cargo de consultor de la municipalidad de Córdoba y del ferrocarril Norte con tareas periodísticas en los diarios La Época y El Interior. Antes de los veinticinco años fue elegido senador provincial.

En 1890 fue nombrado ministro de Gobierno en la administración de Marcos Suárez, a quien acompañó hasta el final de su gestión. Terminado su período de gobierno en el mes de marzo de 1898, la Legislatura lo eligió el mes siguiente senador nacional, por gran mayoría. Al ser electo Vicepresidente de la Nación en 1904, ocupó la Presidencia del Senado. En el verano de 1905 se encontraba en las sierras de Córdoba cuando estalló la revolución dirigida por Daniel Fernández y Aníbal Pérez del Viso, que lo tomó prisionero y lo mantuvo hasta que fue liberado por tropas nacionales a las órdenes del general Winter.

En 1906, tras la muerte del presidente Manuel Quintana, renunció el gabinete en pleno. José Figueroa Alcorta asumió la presidencia y reorganizó el gobierno. A lo largo de su mandato presidencial (1906-1910), José Figueroa Alcorta supo gobernar sin presiones y pudo encauzar una política de renovación.

OBRA DE GOBIERNO:

• Reglamentación, por Ley, del trabajo de mujeres y niños. Ley de Reserva Petrolífera, tras el descubrimiento del importante yacimiento en Comodoro Rivadavia. 
• Inauguración de los edificios del Congreso Nacional y el Teatro Colón. 
• Festejos conmemorativos del Centenario de la Revolución de Mayo. 
• La red ferroviaria crece en un 50%, llegándose a 27.000 km de vías. 
• Inauguración del Ferrocarril Trasandino. Firma de un Protocolo de Límites en el Río de la Plata, con el Uruguay. 
• Declaración del Estado de Sitio. 
• Indulto a los detenidos por la revolución de 1905. 
• Crecimiento de la Telegrafía e inauguración del Cable Transatlántico a Europa.
  

A mediados del año 1909, se hizo pública la candidatura de Roque Sáenz Peña a la presidencia de la República. Para proclamarla se formó la Unión Nacional, compuesta por mitristas, pellegrinistas, roquistas, oficialistas provinciales, fuerzas amparadas por el presidente y ciudadanos independientes como Ricardo Lavalle, que debía presidirla. Los representantes del "viejo régimen" se unieron para sostener esa candidatura, lo mismo que la del entonces ministro de Relaciones Exteriores, Victorino de la Plaza.

El 12 de octubre de 1910, Figueroa Alcorta entregó el gobierno a su sucesor Roque Sáenz Peña. Tras un breve descanso en su hogar y de un viaje de recreo a España en 1911, el nuevo presidente le encomendó la embajada extraordinaria para representar a la Argentina en el Centenario de las Cortes de Cádiz y de la Constitución Liberal de 1812. Con ello se retribuía también la visita de la infanta Isabel; Alcorta fue recibido por el rey Alfonso XIII.

Al regresar al país se dedicó a su profesión de abogado; en 1915 quedó vacante un cargo de ministro de la Suprema Corte y el entonces presidente Victorino de la Plaza lo designó para ocuparla, previo acuerdo con el Senado. Figueroa Alcorta se abstuvo de toda participación política y se dedicó desde el alto tribunal a su función específica. Falleció en Buenos aires el 27 de diciembre de 1931, a los 71 años de edad.