Encarnación Paula Bustillo Salomón. Pintora costumbrista

 

Artista fecunda, presentó sus obras a las distintas exposiciones durante la primera mitad del siglo XX, tanto en la Península como en Cuba y Panamá. Cultivó el género costumbrista, el paisaje y las naturalezas muertas; “Las camareras de la Virgen”, de 1915, es su obra más conocida.

Para más información ver: Un linaje hidalgo del norte de Burgos , p.p. 142-143

CENTRO INTERGENERACIONAL ENCARNACIÓN BUSTILLO SALOMÓN

Encarnación Paula Bustillo Salomón nació en Villarcayo, el 7 de junio de 1876. Era hija del matrimonio formado por Fermín Bustillo y Pereda, de linaje hidalgo, natural de Villacomparada de Rueda (Burgos) y de Adelaida Salomón y San Martín, natural de Roa (Burgos).

Encarnación Bustillo Salomón

Su padre era abogado, motivo por el que la familia se trasladó a Valladolid, donde Encarnación comenzó pronto sus estudios artísticos, trasladándose luego a Madrid para continuar con sus estudios.

No se sabe la fecha de su primer matrimonio, siendo su marido Rufino Zatón Villamor, que falleció en la casa familiar de Villarcayo a los 56 años, cuando Encarnación solo tenía 36. En segundas nupcias se casó con Víctor Gómez García, del Valle de Soba (Cantabria), quien en la Guerra Civil se marchó a Cuba con los dos hijos del matrimonio para evitarles entrar en combate. En La Habana, José Gómez Bustillo estudió y ejerció la ingeniería, mientras que su hermano Miguel Rafael fue abogado y un reconocido entomólogo.

En 1901 la revista Última hora habla de la Exposición de Bellas Artes y Arte Decorativo, en la que Encarnación presentaba una obra de flores y frutas.

En 1903 aparecen referencias a su pintura en el Boletín de la Sociedad Castellana de Excursiones. La “Primera exposición feminista celebrada en Madrid en el Salón Amaré, ha resultado sumamente lisonjera como primer ensayo en que las mujeres se presentan por sí solas formando una colectividad artística digna de toda consideración.”

Encarnación participó en un importante número de Exposiciones Nacionales desde 1901 hasta 1945, así como en los Salones de Otoño desde 1942 hasta 1952. Por el título de sus obras conocemos que presentó tanto pintura de caballete como piezas de artes decorativas. Asimismo presentó obras en las exposiciones Nacionales de Cuba y Panamá entre 1909 y 1916, donde cosechó importantes premios (medalla de oro en la exposición de Cuba en 1909 y de plata en 1911, así como plata en la de Panamá de 1913). Mucho más tarde, en 1945 presentó en la Exposición Nacional de Bellas Artes el cuadro titulado Vendedoras de pescado, que fue calificado por el crítico de ABC, como «una estampa de recio tipo racial»

Bodegón “Las flores y caza muerta” (1902)

Aunque le gustaba pintar bodegones con flores y frutas -temas considerados menores, reservados a las mujeres-, sus obras de mayor envergadura se enmarcan en una pintura regionalista muy del gusto de la época, que se desarrolla con gran fuerza desde finales del siglo XIX, coincidiendo con planteamientos plásticos cercanos al Regeneracionismo y la Generación del 98.

Las camareras de la Virgen

Tal es el caso de la, Las camareras de la Virgen, obra que se exhibe en el Museo de Burgos y que presentó en 1915 a la Exposición Nacional de Bellas Artes, con la que consiguió una Medalla de Tercera Clase. Muestra a la camarera mayor de la Virgen, engalanada con ropa de fiesta como sus compañeras, recibiendo un duro de plata de manos del alcalde. El paisaje del fondo parece corresponder a las Merindades.

La fecha y el lugar de su fallecimiento parece ser que sucedió en 1966 en Madrid, en donde transcurrió gran parte de su vida.

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