“La Dolores” de Calatayud. Famosa copla

 

«Si vas a Calatayud, pregunta por la Dolores, que es una chica muy guapa, y amiga de hacer favores», dice la famosa copla surgida hacia 1840-1850 y que habría obligado a Dolores Peinador a trasladarse a Madrid.

Sirvió de inspiración para la copla anónima que el escritor y periodista José Feliú y Codina escuchó cantar sobre ella a un mendigo ciego en la estación de tren de Binéfar, cuando se dirigía desde Barcelona a Madrid.

María de los Dolores Peinador Narvión, hija del matrimonio celebrado en noviembre de 1818 entre Blas Peinador Pino, natural de Ampudia (Palencia) y Delfina Manuela Narvión Quintilla, de Rivadavia (Pontevedra), una acaudalada dama. Cuando nació Dolores, el 13 de mayo de 1819, su padre se encontraba en Calatayud en calidad de "Teniente retirado en clase de dispensa en esta ciudad" y en posesión del título de abogado. Se reincorporó al Ejército en 1822 y alcanzó el grado de coronel y se retiró definitivamente del servicio en 1825. Fue también abogado de los reales Consejos y llegó a ser Juez de Primera Instancia. Por su afección a los realistas estuvo preso en la Aljafería en 1823.

El certificado de su bautismo reza: En trece de Mayo de mil ochocientos diecinueve, en la iglesia Parroquial de San Juan el Real de la ciudad de Calatayud, Mosén Íñigo Guillén, presidente de esta iglesia, Con licencia de Mi el Regente, Bautizo Solemnemente a una niña que nació en dicho día, a quien puse por nombre Petra , María de los Dolores, Juana, Benita, Íñiga, hija legítima, y natural de Dn Blas Peinador, y Dña Delfina Manuela Narvión, cónyuges, Parroquianos por elección de esta iglesia, Abuelos paternos Dn Pedro Peinador, natural de la Villa de Ampudia, en Castilla la Vieja, y Dña Juana Pino, natural de la Villa de Ribadavia, en el Reino de Galicia: Maternos Dn Antonio Narvión, Dña Manuela Quintilla, cónyuges; fueron padrinos Dn Joaquín Catalina, y Dña Juana López, cónyuges, tíos de la bautizada, a quienes advirtió el Parentesco Espiritual, y la obligación de enseñarle la Doctrina Cristiana; y para que Conste firmo= /Mss: Roque Martínez [rúbrica]

En 1825, retirado del ejército, es nombrado alcalde mayor de Daroca. Fallece su mujer en 1827 y en 1829 casa en segundas nupcias con Casimira García Oseñalde, siendo nombrado después Alcalde-Mayor de Gerona, cargo que desempeñó desde 1832 hasta 1835. A esta ciudad se trasladó con su segunda esposa, dejando sus hijos menores al cuidado de alguna familia, o en algún colegio en Calatayud o en Zaragoza, a juzgar por las partidas de dinero que dedicó periódicamente don Blas para su custodia y manutención, y a partir de 1841, en Madrid.

“La Dolores vivió en Daroca, en la calle Mayor, 155, y era la admiración de la comarca. Mas bien alta, rubia como la candela, sonrosada de piel, apretada de carnes, azules los ojos, ondulado y abundante el cabello, más aún que su belleza, atraía el señorío de su porte y más que su gentileza la sugestión de la mirada”.

En 1838 Dolores, que poseía el título de Infanzona, de deslumbrante belleza, aparece en Calatayud, tal vez residiendo en casa de la familia materna. Tanto en Daroca como en la capital de Jalón existían destacamentos de tropas con motivo de la guerra carlista y allí debió conocer al teniente Esteban Tovar Pérez (nacido en 1814), oriundo del pueblo de Jorairatar (Granada), “en el gozo y posesión de hidalguía”, pero de familia más bien modesta, con el que surge el romance, no aprobado por la familia, que dará lugar a la boda en secreto, celebrada en la iglesia de San Miguel de los Navarros de Zaragoza, el 30 de junio de 1839) y, al menos, a seis hijos: Amalia, Manuel, Enrique, Emilia Cruz, Esteban y Casilda Enriqueta, los primeros en Calatayud y los dos últimos nacidos ya en Madrid.

“Esteban ingresa como cadete en el Ejército en 1834. Después de pasar por varios destinos, en febrero de 1838 es trasladado al Regimiento de Infantería de la Reina, con sede en Zaragoza y el 19 de marzo del mismo año, siendo teniente, es nombrado ayudante del coronel del Tercer Batallón del citado Regimiento. Pocos meses después, a finales de noviembre, causa baja en el Ejército”.

Palacio del siglo XV, cuya titularidad ostentaba el marqués de Ayerbe
y que pasó a convertirse en el Mesón de la Dolores

Parece ser que el padre y la madrastra de Dolores se opusieron al matrimonio por las malas costumbres del militar y recelar de sus intenciones en cuanto que Dolores era heredera de los cuantiosos bienes legados por su madre. Tal asunto deparó largos pleitos entre el capitán y el padre de Dolores que se resistía a legar el patrimonio materno a los hijos de su primer matrimonio. Finalmente, la cuantiosa herencia recayó en el matrimonio y, vencida la primera mitad del siglo, se trasladaron a Madrid, a un piso del alquiler en la calle de la Ballesta, donde, tras enviudar en 1864, Dolores murió el 12 de agosto de 1894 en el Palacio de los Marqueses de Altamira, en la calle de la Flor Alta, núm. 8, lugar en el que trabajaba en calidad de criada. Sus restos fueron trasladados desde dicho palacio hasta el cementerio de la Almudena donde recibió cristiana sepultura en una tumba de caridad .

Las referencias a la nobleza de Dolores y su esposo en: TRASCENDENTALES APORTACIONES SOBRE DOLORES PEINADOR NARVIÓN, «LA DOLORES» DE CALATAYUD por Antonio Sánchez Portero, Publicación núm. 55 del Centro de Estudios Bilbilitanos.

Otras fuentes: http://www.calatayud.org/enciclopedia/peinador.htm