jueves, 1 de abril de 2021

Premio de relato histórico "EMILIA PARDO BAZÁN"

 

La Junta Directiva de la Real Asociación de Hidalgos de España ha acordado la creación del Premio de Relato Histórico "Emilia Pardo Bazán", con una dotación económica de 10.000 euros.

El veredicto del Premio se dará a conocer en noviembre de cada año, correspondiente al mes en que la escritora española inició, en 1882, la publicación de una serie de escritos, reunidos en el ensayo "La cuestión palpitante", la obra pionera de difusión de las ideas modernas de la literatura española.

En las próximas fechas se dará más información sobre este premio y sobre la convocatoria y el convenio acordado con la Cátedra Vargas Llosa, para la puesta en marcha y gestión conjunta con la RAHE de dicho premio.

Semblanza de Doña Emilia Pardo de Bazán. Quizá la escritora española más grande de todos los tiempos.

Precisamente, este año 2021 se celebra el centenario de la muerte de la gran escritora Emilia Pardo Bazán, sucedido en  Madrid, el 12 de mayo de 1921, nacida el 16 de setiembre de 1851. Perteneciente a una noble familia gallega recibió una buena educación, ya que sus padres eran unos convencidos de los derechos de la mujer, llegando a dominar el francés, el inglés y el alemán, aunque no pudo ingresar en la Universidad, vetada por entonces a las mujeres.

Se casó muy joven, en 1868, en el pazo de Meirás, a los diecisiete años, con Don José Quiroga y Pérez Deza, también de familia hidalga, de cuyo matrimonio nacieron tres hijos. Viajó por Europa, publicando luego en El Imparcial crónicas de sus viajes, y desde entonces empezó a destacar por sus obras literarias, novelas, ensayos y crónicas periodísticas.


Fue una gran defensora de los derechos de la mujer, reclamando su derecho a acceder a todos los niveles educativos, a ejercer cualquier profesión, a su felicidad y a su dignidad. Fue la primera mujer en presidir la sección de literatura del Ateneo de Madrid (1906), pero su candidatura a la Real Academia Española fue rechazada en tres ocasiones (1889, 1892 y 1912); sin embargo fue nombrada Consejera de Instrucción Pública (1910). Su padre, Miguel Pardo Bazán, fue nombrado conde pontificio de Pardo Bazán (breve de Pío IX de 13 de junio de 1871, con autorización para su uso en España por RD de 3 de febrero de 1872) y ella fue agraciada con Título del Reino con la misma denominación (Real Decreto de 16 de mayo de 1908), aunque años después pidió cambiar su denominación por el de Conde de la Torre de Cela, a lo que Alfonso XIII accedió (Real Decreto de 1 de mayo de 1916), y poco después ella lo cedió a su hijo (21 de julio de 1916), y fue entonces cuando decidió pedir la sucesión de su título pontificio, que se le concedió (22 de febrero de 1917) y poco después se autorizó su uso en España, el 31 de mayo de 1918.

En 1906 llegó a ser la primera mujer en presidir la Sección de literatura del Ateneo de Madrid y la primera en ocupar una cátedra de literatura en la Universidad Central de Madrid.

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